Halitosis
Es el término científico y clínico, a lo que se conoce comúnmente como mal aliento, es decir, olor desagradable emitido por la boca. Se considera un problema relacionado con la higiene bucal o con enfermedades de la boca, teniendo en la mayoría de los casos origen en la cavidad bucal.
La halitosis más común y menos grave es la matutina, al momento de levantarse, y se produce por el cese del flujo bucal durante el sueño como consecuencia de la disminución de la actividad muscular. Este tipo de halitosis suele desaparecer pronto.
Causas y síntomas
- Acumulación de placa bacteriana en la lengua: no tener rutina de cepillado favorece la proliferación de bacterias en la boca y lengua. Además del cepillo de dientes, es importante usar un limpiador lingual. Los cepillos más recomendables son aquellos que tienen las cerdas suaves ya que no harán sangrar las encías, y con una cabeza pequeña para llegar bien a todos las áreas bucales.
- Caries: la halitosis puede ser la señal de que tus dientes presentan caries.
- Boca seca: falta de hidratación por la falta de bebida como agua.
- Trastornos u otras enfermedades de riñón, hígado o reflujo gástrico.
- El tabaco provoca un aliento característico ya que el alquitrán o la nicotina se adhieren a la mucosa de la boca y los dientes.
- La dieta seguida por el paciente.
- Algunos fármacos como antidepresivos y las prótesis dentarias.
Diagnóstico de Halitosis
Detectar y evaluar la halitosis es complicado, de hecho, uno mismo puede no darse cuenta de que padece mal aliento. La zona trasera de la lengua es, en muchos casos, el origen.
Si percibes que tu mal aliento persiste puedes acudir a tu dentista y la solución más sencilla puede ser realizar una limpieza, además puede darte pautas a seguir y productos que utilizar o incluso derivarte a un periodoncista para evaluar tus encías.
Qué hacer para evitar la halitosis
- Tener especial cuidado en la higiene bucodental. Si notas que tu aliento no es tan fresco, cepilla tus dientes dos veces al día con pasta de diente que contenga flúor, usa hilo o seda dental una vez al día y enjuague bucal.
- Revisión dental: las revisiones a tu clínica dental deben ser periódicas o al menos anuales, para detectar estos síntomas lo antes posible y actuar antes de que se compliquen.
- Hábitos alimentarios: realizar algunos cambios en el estilo de vida como abandonar la cafeína, evitar aquellos alimentos que producen un aliento fuerte y los condimentos, beber bastante agua y dejar de consumir alcohol y tabaco.
Si ya sigues los consejos anteriores y tu problema de halitosis continúa o no te sirven, puede que sea una halitosis patológica que debe recibir el tratamiento adecuado dependiendo del foco que lo desencadena.
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